El Banco de México (Banxico) inició 2025 con un recorte de 50 puntos base en la tasa de interés, dejándola en 9.50%, en línea con las expectativas del mercado. La decisión, anunciada en la reunión de política monetaria del 6 de febrero, entró en vigor a partir del 7 de febrero y representa el ajuste más significativo desde 2021.
Esta medida forma parte de la estrategia del banco central para mantener una política monetaria restrictiva, pero con espacio para ajustes graduales en función de la evolución de la inflación. En su comunicado, Banxico destacó que, de mantenerse el contexto favorable, podría continuar con recortes de magnitud similar en el futuro.
Decisión dividida en la Junta de Gobierno
La reducción de la tasa de referencia no fue unánime. La gobernadora Victoria Rodríguez Ceja y los subgobernadores Galia Borja, Gabriel Cuadra y Omar Mejía votaron a favor del ajuste de 50 puntos base, mientras que Jonathan Heath respaldó un recorte más moderado de 25 puntos base.
“El Banco Central reafirma su compromiso con su mandato prioritario y la necesidad de perseverar en sus esfuerzos por consolidar un entorno de inflación baja y estable”, enfatizó el comunicado.
Impacto de las políticas comerciales de Donald Trump
Banxico también reconoció en su análisis los riesgos globales derivados de posibles políticas proteccionistas en Estados Unidos, particularmente los aranceles promovidos por Donald Trump. La gobernadora Rodríguez Ceja advirtió que estos pueden generar efectos mixtos en la economía mexicana:
- Debilidad económica en EE.UU. 🏭 📉 → Menor presión inflacionaria.
- Mayor depreciación del peso 💲📈 → Riesgo de inflación al alza.
Trump acordó una pausa de un mes en la aplicación de aranceles a México, tras un acuerdo con la presidenta Claudia Sheinbaum, quien se comprometió a reforzar la vigilancia fronteriza con 10,000 guardias nacionales. No obstante, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, advirtió que “no hay garantías” de que esta tregua se mantenga.
Perspectivas de inflación y política monetaria
Banxico ajustó su proyección de inflación para el primer trimestre de 2025, situándola en 3.7%, 10 puntos base por debajo de su estimación previa. Se prevé que al cierre del año la inflación sea del 3.3%, acercándose al objetivo del 3%.
Con este ajuste, Banxico abre la puerta a futuros recortes en la tasa de referencia, siempre que la estabilidad inflacionaria y las condiciones externas lo permitan. Mientras tanto, el entorno global y los riesgos comerciales seguirán siendo factores clave para la política monetaria en los próximos meses. 📊
